EL PORTAFOLIO DE EVIDENCIAS COMO INDICADOR FORMATIVO DE COMPETENCIAS

M. Alvarado Arellano1
C. García Franchini2
M. P. Torrijos Muñoz3

 

RESUMEN
En los programas académicos atendidos se aplican tres tipos de evidencias: dos ensayos, dos exámenes en equipo y un examen individual; para cada tipo se establece una rúbrica y la calificación sumativa por unidad es ponderada, mientras la evaluación sumativa final es la media aritmética de las unidades acreditadas. Una vez estructurada la sumativa final se evalúa el portafolio de evidencias como un porcentaje adicional a la sumativa final.
El portafolio de evidencias del alumno se estructura con la colección ordenada de todas las evidencias, y esencialmente cuatro autoevaluaciones: autoevaluación sobre el comparativo entre el mejor y el peor ensayo, autoevaluación sobre el comparativo entre el mejor y el peor examen de equipo y similarmente para los exámenes individuales. La cuarta autoevaluación es integral sobre el curso.
El análisis cualitativo de dichas autoevaluaciones muestra el fortalecimiento de competencias sistémicas, interpersonales e instrumentales previstas en el diseño didáctico del curso, es a su vez una autoevaluación y heteroevaluación integral que marca la interpretación que el estudiante le da al curso desde su perspectiva.

 

 

1Profesor del Tecnológico Nacional de México en su campus Instituto Tecnológico de Puebla adscrito al Departamento de Ciencias Básicas. Puebla, Pue. México. cgfranchini@gmail.com
2Profesora del Tecnológico Nacional de México en su campus Instituto Tecnológico de Puebla adscrita al Departamento de Ciencias Básicas. Puebla, Pue. México. maraare@yahoo.com
3Profesora del Tecnológico Nacional de México en su campus Instituto Tecnológico de Puebla adscrita al Departamento de Ciencias Básicas. Puebla, Pue. México. torrijospatricia@hotmail.com